lunes, 21 de septiembre de 2009

Mi voz como mujer no se escucha y el Artículo 30 me lo confirmó.

Ultimamente me he tenido que dar cuenta de una terrible realidad que ha invadido mi país y para que nos la imaginemos aqui les narro varias situaciones en la cuál la mujer de ahora en adelante será un perfecto objeto por la aprobación del artículo 30 de la Constitución.

Imaginemos lo siguiente:

De ahora en adelante las mujeres que sufran el ataque de un perfecto desconocido que las vió bonitas y vulnerables para una violación más, deben estar de acuerdo con llevar en su vientre un bebé no deseado, producto de ese ser asqueroso y despiadado que las usó para saciar la sed de agredir, maltratar y humillar a una mujer indefesa. Para colmo de males ahora esos violadores también tienen el apoyo de las Iglesias de convertirse en padres porque éstas tampoco están de acuerdo con la píldora del día después y ahora le agregan el punto final con el artículo 30.

En segunda instancia tenemos el caso de las mujeres que tienen un embarazo de alto riesgo tanto para la vida de la madre y por consiguiente la del feto. Si se da el caso en una mujer dominicana o residente en nuestro país ya no existe el derecho a elegir, simplemente ambos mueren o uno de los dos se salva. Las mujeres ya no tenemos derecho a la vida, muchas desearán haber nacido hombres para poder tener voz y voto en casos como éstos.

Me gustaría que l@s legisladores que aprobaron el artículo 30 de la Constitución, el gobiero y las Iglesias destinaran fondos para la creación de orfanatos, que harán muchisima falta por los casos de niños abandonados por sus madres violadas por sus padres, o en caso que la madre muera y ésta sea una madre soltera.

NO ESTOY DE ACUERDO CON EL ARTICULO 30 DE LA CONSTITUCION Y QUE SE ENTERE EL MUNDO QUE EN LA REPUBLICA DOMINICANA LAS MUJERES COMO EN SIGLOS PASADOS NO TENEMOS VOZ NI VOTO EN CASOS COMO ESTOS.