Cuanto anhelo tu presencia aquí, conversar por horas, mirarnos a los ojos, sentir y fantasear con el aroma de nuestros cuerpos separados por una leve distancia, experimentar la sensación de nuestros cuerpos abrazados, coquetear observando fijamente tus labios imaginando acariciarlos con la suavidad y calidez de los míos.
Sueño con el día en que pueda besar esos labios que tanto he imaginado, suave, sin prisa, paralizar el tiempo en ese momento y quedarme ahí hasta saciar mi sed, incitar tu desnudéz sin tocarte, acostarnos abrazados sin hacer el amor, solo respirar y dejar fluir nuestras emociones.
Siento todas las caricias y los besos que tengo reservados para ti y percibo que mi corazón le queda grande a mi pecho porque no te tengo, porque estas en lo mas profundo de mi creatividad y al final resultas ser solo ficción de la pasión que corre por todo mi cuerpo y me quedo sola con mis ¨caricias imaginadas¨.